Ahora, los diseñadores han optado por los colores que traen confianza y espíritu, tonalidades alegres que permiten una serie de combinaciones creativas.

Uno de ellos es el amarillo, que rinde homenaje al Sol, a la luminosidad, a la alegría y a la vida. Este tono fue elegido por casas de moda como Dior y Dolce & Gabbana.

El naranja, que aporta vitalidad y se ha inspirado en las puestas de sol. Bajo el naranja están todos los tonos similares, desde el Pantone 17-1564–Fiesta hasta el Pantone 16-1546 -Living Coral.

Esta variedad permite ampliar las opciones para combinar las prendas, sobre todo con tonos neutros como el beige, el café o el taupé.

Si hay un color que represente a la alegría es el fucsia. Este tono no solo es divertido y vibrante, sino que es perfecto para irradiar vitalidad y feminidad.

El fucsia tiene su inspiración en las flores, parte del rosa pastel hacia el color más brillante, una tendencia que ha aparecido incluso en maquillaje, uñas y cabello.

El azul ha sido considerado un color frío, ligado a estados de ánimo negativos y estaciones congeladas. Sin embargo, el azul es un tono elegante, con alma y fuerza, que permite combinaciones únicas con otros colores.

En esta gama predominan los tonos fuertes, en combinaciones con neutros, porque son colores que transmiten tranquilidad y hablan de la naturaleza.

El verde es uno de los aciertos cromáticos para la temporada que se viene. Los tonos relacionados con la naturaleza han captado la atención de los diseñadores. Sobre todo luego de la tendencia que se volvió la protección de la Amazonía por los incendios que la afectaron.

Los verdes -desde el oscuro, pasando por el aceituna, el limón y hasta el pistacho- son perfectos para combinarse entre sí y con otros colores como el beige, el negro, el café, el blanco e incluso con los tonos pasteles rosa y gris.